El Presidente busca mostrar baja de inflación y acuerdo con el FMI. La oposición, novedades del FBI. La estrategia en Diputados. Macri contraataca y vuelve CFK.
La partida se juega en los Estados Unidos. Javier Milei apuesta a que su vínculo con Donald Trump y un eventual acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) aplaquen el Libragate, pero en el gigante del norte también están los problemas para el libertario. La Casa Rosada puede manejar la agenda local y hasta conseguir la complicidad de parte de la oposición, pero las investigaciones en terreno estadounidense son una caja de Pandora.
Contra todos los pronósticos, después de una semana caótica, el Gobierno se llevó dos triunfos clave el jueves en el Senado. Logró que se aprobara la suspensión de las elecciones Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) y frenó el armado de una comisión investigadora por la criptoestafa que promocionó el Presidente. En el camino, hizo estallar el bloque de la UCR y expuso una burda negociación de casta con los gobernadores, que aceptaron cuidarle la espalda a Milei a cambio de no se sabe bien qué.
Habrá que esperar las próximas semanas para ver si el triunfo oficialista es definitivo. En la Cámara de Diputados tramita otro puñado de proyectos que se activarán una vez que Milei concurra al Congreso para dar inicio al período de sesiones ordinarias, el 1 de marzo. La visita del Presidente, en medio del escándalo, será más que tensa.
En enero, la Casa Rosada preparaba para que Milei hiciera anuncios económicos, como la baja de retenciones, y diera al menos indicios del acuerdo con el FMI. El primer punto se adelantó por la falta de dólares y el segundo viene demorado. El oficialismo busca la forma de dar la sorpresa en medio del caos, en el comienzo del año electoral.
Furiosa con sus pares del Senado por la entrega del jueves, la oposición en Diputados se prepara para activar las iniciativas que ya se presentaron en la cámara baja. Hay pedidos de juicio político, de interpelación a funcionarios clave del Gobierno y proyectos de armado de otras comisiones investigadoras.
Las iniciativas pertenecen a diferentes bloques: Unión por la Patria, Encuentro Federal, la izquierda, la Coalición Cívica y Democracia para Siempre. Son espacios que tienen una “coordinación natural” que se consolidó en la aprobación de leyes como la de financiamiento universitario.
A diferencia de lo que sucedió en la cámara alta, se trata de proyectos cuya aprobación no requerirá de dos tercios en este recinto. Bastará con el armado de una mayoría simple para aprobarlos. Entonces, para la oposición será de construcción difícil, pero no imposible. Mientras el kirchnerismo impulsa el juicio político, apurado por las demandas de su electorado, los demás espacios apuestan a un avance progresivo.
“Esto es una escalerita”, dice uno de los articuladores principales entre todos los espacios. Según esa mirada, el propio accionar del Gobierno y otros factores externos irán generando un malestar en el Congreso que impulsará a los dudosos a plegarse al pedido de explicaciones al Ejecutivo.