ESCAPADA A EE.UU.
Javier Milei y el Fondo negocian el "monto" y la entidad pone condiciones para su uso. Kristalina Georgieva no dio señales tras la última reunión.
El jueves, el mandatario, el ministro de Economía y otros miembros de la comitiva se reunieron en Washington con la directora gerente Kristalina Georgieva. El comunicado posterior fue escueto. "Hoy recibí al Presidente Milei en el FMI para hablar sobre el plan de estabilización y crecimiento de Argentina, que está dando resultados significativos. Nuestros equipos siguen trabajando de manera constructiva en pos de un nuevo programa", indicó la titular en su cuenta de Twitter.
Hay escasas pistas sobre el ida y vuelta entre el equipo que dirige Caputo y el staff técnico del Fondo, aun cuando quedan dos meses para el plazo que el titular de la cartera económica puso para anunciar un acuerdo, el "primer cuatrimestre". La última definición del jefe del Palacio de Hacienda fue que se está discutiendo el "monto" y el cronograma de desembolsos que implicaría.
El Gobierno ya manifestó su intención de utilizar las divisas del FMI para "sanear el balance del Banco Central" y recomponer reservas. Sin embargo, consultado en una entrevista televisiva sobre si esa suma sería de "libre disponibilidad", respondió que será "parte de un esquema".
El FMI presta dinero bajo dos términos: apoyo presupuestario, para un fin en específico; o de "libre disponibilidad", que significa que la administración puede definir el destino de los fondos. Esta última opción es la que está sobre la mesa de las conversaciones, pero con demora, porque el organismo se fija tanto en lo técnico como en el historial del país y sus actores.
Fuentes que estuvieron en negociaciones anteriores con el Fondo explicaron a Letra P, que en el marco del programa, se firman documentos asociados al acuerdo que puedan o no firmar los funcionarios, con compromisos que no son públicos y que, en general, tienen que ver con cómo van a actuar en caso de que la hoja de ruta no esté funcionando.
"Puede haber compromisos de todo tipo. Es posible que, por ejemplo, se intente establecer bandas y límites de intervención que pueden o no ser públicos", indicó un exfuncionario. Los términos en los cuales Argentina pueda usar los dólares toman especial relevancia en medio de la discusión del atraso cambiario.
En el marco de un año electoral y sobre la base de una inflación desacelerada que cala en la opinón pública, el plan oficial es mantener un tipo de cambio barato durante 2025 y, tal como repitieron Milei y Caputo en varias ocasiones, no devaluar. El FMI no suele ver con buenos ojos que los países intervengan con reservas en su mercado cambiario para sostener una cotización cuando, al mismo tiempo, sostienen metas y una deuda millonaria.
El CV de Caputo también está en juego. La evaluación ex post del préstamo stand by por u$s 57.000 millones de 2018 (una especie de auditoría que realiza la entidad con todos sus programas) cuestionó que la gestión de Mauricio Macri no interpuso controles de capitales para ordenar los flujos y evitar la fuga de divisas ni reestructuró su deuda.
El ahora ministro de Economía por ese entonces era presidente del Central, es decir, el custodio de los dólares que había inyectado el FMI. "Es una razón más para pedir garantías con documentos reservados", puntualizó la voz consultada.