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NOVENA SECCIÓN
Un sector del MDF desconfía de La Cámpora y le pide al gobernador que resista. “Cristina tira la trampa de la unidad”, advierte. La sombra de la Corte Suprema.
Pese a la reunión a solas entre Cristina Fernández de Kirchner y el gobernador Axel Kicillof, convocada por pedido de la expresidenta tras más de cinco meses sin diálogo, una porción del Movimiento Derecho a
No todos en el espacio que lidera Kicillof comparten esa visión. Otro grupo está dispuesto a avanzar con un esquema de unidad, si se logran imponer determinadas condiciones. Ambas posturas se pondrán sobre la mesa el próximo lunes durante un encuentro clave en la gobernación bonaerense.
A esa discusión se suma un factor externo que puede redefinir todo el tablero: las versiones que circulan sobre un posible fallo inminente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación que podría dejar firme la condena contra Fernández de Kirchner en la causa Vialidad.
Luego del encuentro, el sector más crítico de la expresidenta dentro del MDF reafirmó su rechazo. Consideran que lo más conveniente para el espacio -y para Kicillof- es marcar diferencias claras. En ese marco, califican la reunión como “un error”, y sostienen que debió realizarse al menos una semana después, dando margen para fijar una postura pública, como hicieron los intendentes Mario Secco (Ensenada) y Fabián Cagliardi (Berisso).
l Futuro (MDF) rechaza un acuerdo con el kirchnerismo duro. Desde ese sector del peronismo consideran que el encuentro fue un error político del mandatario bonaerense.
“No tendría que haber ido. Está claro que Cristina te tira la trampa de la unidad”, sostuvo un dirigente kicillofista ante Letra P. Y añadió: “Necesitábamos una semana más para marcar nuestra línea”. Otra fuente agregó que en un esquema de unidad “Axel no gana nada para posicionarse hacia 2027”.
“Cristina lo va a cagar”, afirmó crudamente otro referente que promueve la candidatura del gobernador y sumó: “Si querés construir futuro, tenés que desmarcarte de Cristina, La Cámpora y Sergio Massa”. En esa misma línea se ubica el intendente de Avellaneda, Jorge Ferraresi, quien está dispuesto a encabezar la lista de concejales en su distrito con boleta corta si se consuma un acuerdo con el kirchnerismo. La idea circula entre otros jefes comunales que también evalúan ese camino.
Estos argumentos serán puestos sobre la mesa el lunes próximo, cuando más de 40 intendentes del MDF se reúnan a las 15 en la sede de la gobernación. Algunos de ellos, sin embargo, prefieren cerrar un acuerdo para evitar internas en sus distritos.
Para contener la tensión, el gobernador impulsa una dinámica asamblearia en el MDF. Según fuentes oficiales, durante el encuentro del lunes informará sobre el diálogo con la expresidenta y abrirá la discusión sobre los próximos pasos. “Bien horizontal”, describen desde su entorno, que afirma que incluso se votará quiénes serán los interlocutores con los distintos sectores del peronismo.
Desde el edificio gubernamental de calle 6 creen que la diversidad de posiciones no es un problema y recuerdan que el espacio ha avanzado pese a sus diferencias internas. De todas maneras, Kicillof actúa con cautela. El jueves a las 20.57, apenas terminó la reunión con Fernández de Kirchner, envió un mensaje al grupo del MDF: “Compañeros. Se produjo la reunión. Propusieron armar un grupo para ver de empezar a construir listas conjuntas. Nuestro espacio sigue mientras tanto sus actividades y crecimiento”.
En paralelo, el MDF tiene organizados plenarios seccionales: este sábado en la Quinta, y en los próximos días en la Cuarta y la Sexta. También se programó un plenario distrital en Quilmes para el miércoles.
Mientras tanto, en el entorno de CFK hay optimismo. Aunque aún no definieron a sus delegados, creen que las conversaciones deben comenzar cuanto antes, incluso el mismo lunes.
Desde el Instituto Patria valoraron la reunión como “muy positiva” y aseguraron que los intendentes afines a la presidenta del PJ recibieron bien la noticia. “Estamos en el camino que todos queríamos, el de la unidad y el de pensar juntos cómo ganaremos las elecciones de septiembre y octubre”, expresó una fuente del espacio.
La disputa interna del peronismo bonaerense está condicionada por un dato externo: la posibilidad de que la Corte Suprema falle contra Cristina, confirmando su condena en la causa Vialidad. De concretarse, la expresidenta debería cumplir seis años de prisión y quedaría inhabilitada para ejercer cargos públicos.
“Si la Corte falla, todo lo que estamos hablando deja de tener sentido: cambia la estrategia, la campaña, la política. Es otro mundo”, expresó a Letra P un dirigente del peronismo bonaerense. Otras fuentes coinciden: la ratificación de la condena patearía el tablero electoral.
