Decenas de trabajadores de PAMI, en la sede central, no pudieron ingresar a sus puestos de trabajo y se presume que se trata de una nueva ola de despedidos en el organismo.
Según fuentes allegadas a Noticias Argentinas, serían 200 los empleados desafectados; 50 de ellos, que se hicieron presentes como todos los días y quisieron fichar, se encontraron con que el sistema “no les toma las huellas” para permitir el ingreso al edificio.